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La gente en México sabe que la escasez del agua y su contaminación son problemas graves, pero pocos tienen conciencia de ello en su ciudad, poblado o colonia. Existe una desvinculación en la mente del usuario del agua entre el líquido que llega a su casa y el lugar del que procede; también se desconocen los impactos sociales y ambientales de su extracción. Por supuesto, tampoco se conocen los esfuerzos económicos para extraerla, potabilizarla y distribuirla. Estas son algunas de los conclusiones a las se llegaron después de la implementación del Programa de Manejo, Uso y Reuso del Agua en la UNAM (PUMAGUA).
RETOS Y OPORTUNIDADES
Después de recabar información a través de encuestas a nivel nacional y en ciudades específicas, PUMAGUA recomienda que los usuarios conozcan desde niños todo el proceso y los costos implicados en el abastecimiento del agua, tanto para fomentar su uso racional, como para propiciar la cultura del pago del agua potable. Advierte que si bien los esfuerzos de comunicación sobre el agua se centran en niños de primaria, no debe descuidarse la sensibilización entre los jóvenes de 18 y 35 años, así como la de las amas de casa.
