En agosto de 2015 la SEP informó que en el país hay 2 mil 236 planteles de bachillerato con alta deserción, en los que apenas 4 de cada 10 estudiantes concluyen sus estudios. El mapeo identificó que el mayor número de planteles con alta deserción se encuentra en el estado de México, donde 287 escuelas están catalogadas como focos rojos. De acuerdo con estos datos proporcionados por la SEP, la tasa de deserción es igual a la que había en 1990 a nivel nacional.
RETOS Y OPORTUNIDADES
En opinión del ex subsecretario de Educación Pública y actual director del Centro de Estudios Educativos y Sociales, Miguel Székely, el abandono de la escuela debe analizarse desde las primeras etapas de escolaridad para lograr un hilo conductor claro entre la educación preescolar y la media superior, que es la etapa más crítica respecto a este fenómeno. De manera paradójica, es en el nivel de educación media superior en el que se dan las mejores oportunidades para que los jóvenes regresen a estudiar. La primera Encuesta Nacional de Deserción del Consejo para la Evaluación de la Educación del Tipo Medio Superior, a.c. (COPEEMS) consignó que 67% de los jóvenes que abandonan el bachillerato desean retomar los estudios, después de comprobar en el mercado laboral que un certificado marca la diferencia para obtener un mejor trabajo.