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El uso de Internet en México ha crecido exponencialmente en los últimos años (entre 2001 y 2014 los usuarios pasaron de 7,1 a 47,7 millones, según cifras del INEGI). Este ritmo de crecimiento ha sido insuficiente para abatir el rezago digital. Los análisis nacionales e internacionales reportan que el uso restringido de las tic, dificulta el desarrollo de las comunidades, en especial de los sectores marginados.
RETOS Y OPORTUNIDADES
Las TIC, además de constituir un imprescindible motor de crecimiento económico (competitividad, creación de empleos y formación de capital humano) en las naciones en las que se ha promovido su desarrollo, tienen un papel especial en el proceso de enseñanza-aprendizaje, el abatimiento del rezago educativo y el acceso a la cultura. Hacer viable el derecho-garantía de acceso a las tic en el país depende de la creación de nuevas políticas públicas e iniciativas legislativas. La líneas de acción para revertir la brecha digital y aumentar la cobertura y banda ancha (hoy de 37,05%) son alcanzar el promedio de digitalización que marca la OCDE (59,2%) para finales de 2018 y mejorar la coordinación entre la iniciativa privada y el sector público para integrar a quienes hoy se mantienen excluidos de los beneficios de las TIC.
