De la misma manera en que los procesos productivos se han vuelto más sofisticados, los métodos de reclutamiento de las empresas son más exigentes. A las competencias técnicas o “duras” (relacionadas con los conocimientos profesionales) ahora se suma la exigencia de competencias sociales o “suaves” (relacionadas con la forma en que las personas trabajan juntas, interactúan, se comunican o manejan emociones). La Encuesta Nacional de Competencias Profesionales 2014 (ENCOP2014) reveló que 26% de las empresas entrevistadas tienen vacantes que no han podido cubrir debido a que los candidatos carecen de las competencias requeridas.
RETOS Y OPORTUNIDADES
Los profesionistas jóvenes tendrán mejores oportunidades de trabajo si se convencen de que no solamente basta con el título o grado académico. Es importante que se ponga mayor énfasis en el desarrollo y certificación
de competencias “suaves”. En la ENCOP2014, las empresas marcaron como competencias prioritarias: trabajo en equipo, liderazgo, comunicación con otros, eficiencia personal, cultura general e innovación y emprendimiento.