Aprender a leer es un proceso complejo que no ocurre por sí solo. La mejor manera de enseñar a los niños a leer es haciéndolo divertido.
La mayoría de la gente no piensa en el proceso de aprender a leer hasta que decide empezar a enseñar a sus propios hijos en casa.
Al contrario de lo que algunas personas creen, aprender a leer no es un proceso “natural” que ocurre por sí solo. Es un tema complejo que requiere la enseñanza adecuada de diversas habilidades y estrategias, como la fonética (conocer la relación entre letras y sonidos) y la conciencia fonémica.
La buena noticia es que, aunque la lectura en sí es un proceso complejo, los pasos que se toman para desarrollar estas habilidades son bastante simples y directos. Para enseñar a los niños a leer y convertirla en una experiencia positiva y gratificante, les traemos estas estrategias simples y probadas a continuación.
Aquí hay 10 pasos para enseñarle a tu hijo a leer en casa:
1. Utiliza canciones y rimas infantiles para desarrollar la conciencia fonémica
Las canciones infantiles y las rimas infantiles no solo son muy divertidas: la rima y el ritmo ayudan a los niños a escuchar los sonidos y las sílabas de las palabras, lo que les ayuda a aprender a leer. Una buena manera de desarrollar la conciencia fonémica (una de las habilidades más importantes para aprender a leer) es aplaudir rítmicamente y recitar canciones al unísono. Esta actividad lúdica y de unión es una manera fantástica para que los niños desarrollen implícitamente las habilidades de alfabetización que los prepararán para el éxito en la lectura.
2. Haz tarjetas de palabras simples en casa
Recorta tarjetas simples y escribe una palabra que contenga tres sonidos en cada una (por ejemplo, pez, luz, mar, sol, gol, hoy, oso). Invita a tu hijo a elegir una tarjeta, luego lean la palabra juntos y levanten tres dedos. Pídales que digan el primer sonido que escuchan en la palabra, luego el segundo y luego el tercero. Esta sencilla actividad requiere poco tiempo de preparación y desarrolla habilidades fonéticas y de decodificación esenciales (ayudándolos a aprender a pronunciar las palabras). Si su hijo recién está comenzando a aprender las letras del alfabeto, concéntrese en el sonido que produce cada letra, más que en los nombres de las letras.
3. Involucra a tu hijo en un entorno rico en material impreso
Crea oportunidades diarias para desarrollar las habilidades de lectura de tu hijo mediante la creación de un entorno rico en letras en el hogar. Ver palabras impresas (en carteles, gráficos, libros, etiquetas, etc.) permite a los niños ver y aplicar conexiones entre sonidos y símbolos de letras. Cuando esté fuera de casa, señale las letras en carteles, vallas publicitarias y letreros. Con el tiempo, puede modelar la pronunciación de las letras para formar palabras. Concéntrese en la primera letra de las palabras. Pregúntele a su hijo “¿Qué sonido es esa letra?” “¿Qué otra palabra comienza con ese sonido?” “¿Qué palabra rima con esa palabra?”
4. Juega juegos de palabras en casa o en el coche
Introduce juegos de palabras sencillas de forma regular. Concéntrate en jugar juegos que animen a tu hijo a escuchar, identificar y manipular los sonidos de las palabras. Por ejemplo, comience por hacer preguntas como:
“¿Con qué sonido comienza la palabra ____?”
“¿Con qué sonido termina la palabra ______?”
“¿Qué palabras comienzan con el sonido ____?”
“¿Con qué palabra rima ____?”.
5. Comprender las habilidades básicas involucradas en enseñar a leer a los niños
Es importante recordar que aprender a leer implica varias habilidades diferentes. Hay cinco componentes esenciales de la lectura sobre los que puede leer aquí. Estas son las habilidades que todos los niños necesitan para aprender a leer con éxito. En resumen, estos incluyen:
Conciencia fonémica: la capacidad de escuchar y manipular los diferentes sonidos de las palabras.
Fonética: reconocer la conexión entre las letras y los sonidos que hacen.
Vocabulario: comprender el significado de las palabras, sus definiciones y su contexto
Comprensión de lectura: comprender el significado del texto, tanto en libros de cuentos como en libros de información.
Fluidez: la capacidad de leer en voz alta con velocidad, comprensión y precisión.
6. Juega con imanes de letras
Los sonidos de las vocales medias pueden ser complicados para algunos niños, por esa razón esta actividad puede ser tan útil. Prepara imanes de letras en el refrigerador y tira las vocales hacia un lado (a, e, i, o, u). Di una palabra CVC (consonante-vocal-consonante), por ejemplo, mar, y pídale a tu hijo que la deletree con los imanes. Para ayudarlos, diga en voz alta cada sonido de vocal (/ a /, / e /, / i /, / o /, / u /) mientras señala su letra, y pregúntele a su hijo cuál emite un sonido similar al del medio.
7. Aprovecha el poder de la tecnología para mantener a tu hijo comprometido
Aprender a leer debe ser un proceso agradable para mantener a los niños motivados para mejorar. A veces, un niño puede estar lleno de entusiasmo por aprender al principio, pero una vez que choca contra una pared puede sentirse abrumado y darse por vencido fácilmente. Como padre, puede parecer imposible retomar el ritmo y saber dónde llenar los vacíos que puedan estar causando frustración.
8. Lean juntos todos los días y hagan preguntas sobre el libro
Mucha gente no se da cuenta de cuántas habilidades se pueden adquirir con el simple acto de leerle a un niño. No solo les estás mostrando cómo pronunciar palabras, sino que también está desarrollando habilidades clave de comprensión, aumentando su vocabulario y permitiéndoles escuchar cómo suena un lector fluido. Sobre todo, la lectura regular ayuda a su hijo a desarrollar el amor por la lectura, que es la mejor manera de prepararlos para el éxito en la lectura.
Fortalece las habilidades de comprensión de tu hijo haciendo preguntas mientras lee. Para los niños más pequeños, anímelos a participar con las imágenes (por ejemplo, “¿Ves el bote? ¿De qué color es el gato?”). Para los niños mayores, haga preguntas sobre lo que acaba de leer, como “¿Por qué creen que el pajarito tenía miedo?” “¿Cuándo se dio cuenta Andrea de que tenía poderes especiales?”
9. Juega juegos para memorizar palabras de uso frecuente a primera vista todos los días
Las palabras reconocibles a la vista son aquellas que no se pueden pronunciar fácilmente y deben reconocerse a la vista. Las palabras reconocibles a la vista de alta frecuencia son las que aparecen con mucha frecuencia en la lectura y la escritura (por ejemplo, tú, yo, soy, para, él, tengo, ellos, donde, estaba, hace).
La estrategia para aprender palabras reconocibles a la vista es “Ver la palabra, decir la palabra”. Aprender a identificar y leer palabras reconocibles a la vista es esencial para que los niños pequeños se conviertan en lectores fluidos. La mayoría de los niños podrán aprender algunas palabras reconocibles a la vista a la edad de cuatro años (por ejemplo, es, eso, mi, yo, no y ver) y alrededor de 20 palabras reconocibles a la vista al final de su primer año de escuela. Puede enseñar palabras reconocibles a la vista jugando con tarjetas o usando programas de lectura.
10. Sé paciente; ¡La mejor manera de enseñar a los niños a leer es hacerlo divertido!
Cada niño aprende a su propio ritmo, así que recuerda siempre: lo más importante que puedes hacer es hacerlo agradable. Al leer con regularidad, mezclar las cosas con las actividades que elija y dejar que su hijo elija sus propios libros de vez en cuando, inculcará un amor temprano por la lectura y les dará la mejor oportunidad de leer con éxito en poco tiempo.